Tata

· Vendida ·

Mis alegrías nunca las sabrás, hermanita,

y mi dolor es ése, no te las puedo dar:

vinieron como pájaros a posarse en mi vida,

una palabra dura las haría volar.

Pienso que también ellas me dejarán un día,

que me quedaré solo, como nunca lo estuve.

Tú lo sabes, hermana, la soledad me lleva

hacia el fin de la tierra como el viento a las nubes!

Pero para qué es esto de pensamientos tristes!

A ti menos que a nadie debe afligir mi voz!

Después de todo nada de esto que digo existe…

No vayas a contárselo a mi madre, por Dios!

Pablo Neruda

Como su propio nombre indica, esta niña ya tiene dueña... Mi querida hermanita, que me hizo el encargo y confió en su inconsciente hermano para adornar un rinconcito de su hogar. Y parece ser que acertó!

La pieza utilizada la eligió ella, lo cual añadió un handicap importante a la realización, ya que me limitó bastante la creatividad. Por suerte, mi unicornio azul vino a rescatarme junto a las 7 musas de Apolo, y aproveché una increíble pieza de madera de olivo para hacer de base. Le añadí los huecos para las velas, ya que es un complemento que sabía que ella utilizaría con frecuencia.

La tulipa en esta ocasión es reutilizada, pero no le resta belleza. Nácar auténtico que le da un toque muy elegante y a la vez hogareño, por sus tonos cálidos.

Un reto que tuvo final feliz. Tened por seguro que si alguien quiere una lámpara personalizada, recogeré el guante sin dudarlo!! Sólo necesitaría que me contestaseis a 3 o 4 preguntas para conocer vuestros gustos. El resto es cosa mía...